Esta noche me siento como un pez de pajarería en un recipiente de cristal. Escribo sin retórica ni artificio para aligerar mi ansiedad.
Me han dicho que dejar de pensar es llegar al fondo y subir. Pero cuando suba, ¿no volveré a pensar? Yo ya estoy a punto de tocar el fondo. Tan sólo necesito un poco más de impulso. Espero no quedarme sin oxígeno antes de tocarlo.
Los peces cenan sushi cuando están tristes, pero en mi nevera sólo hay restos de escarola y lemon curd.
23/7/09
20/7/09

Terapia química contra el desamor. Dos ciclos de líquido rojo, veneno reparador. Células buenas y malas, amores y desamores. Me curaré y dejaré de sentir...
Domingo entre sábanas y flores, desnudo, 23 grados centígrados, pero Madrid arde a 40. Estoy cansado de bailar hasta el amanecer. Esta enfermedad me debilita.
Cuando termine mi terapia ya no sufriré, tampoco seré feliz. Maravillas de la química.
Brócoli anticancerígeno para desayunar.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)